El código morse y el alfabeto de banderines no se utilizan mucho hoy en día (salvo en la náutica y en la aviación), pero pueden ser muy interesantes o útiles para un juego u otra actividad.

Algunas nociones básicas sobre el conocimiento del clima son esenciales para excursionar por la naturaleza y al momento de partir de campamento.

Una forma bastante acertada de predecir el clima es observando las nubes.

Los Estratos (típica nube achatada) demuestran un buen tiempo sin lluvias.

Los Cirros (nubes planas y estiradas) indican cambio de tiempo, que será más rápido cuanto más rápido éstos se agrupen. La concentración de Cúmulos (nubes como copos de algodón achatadas en su base) indica que el cambio en el estado del tiempo será pronto. La formación de Cúmulonimbos (nubes bajas, cerradas, oscuras y "gordas") indica tormenta. Las Nimboestratos son como copos de nieve oscuros en su base, que anticipan a la lluvia. El resto de las nubes (Cirroestratos, Cirrocúmulos, Altocúmulos, Altoestratos, Estratocúmulos) son pasajes entre uno y otro tipo, con las mismas consecuencias.

Si el atardecer muestra un cielo rojizo, el día siguiente traerá buen tiempo. Si está gris o amarillento, seguramente habrá viento. Si el cielo esta densamente nublado, los ruidos son huecos y la visibilidad no es buena, las posibilidades de lluvia son altas.

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Saber orientarse es muy importante en todas las actividades que hacemos en la naturaleza, ya que a veces nos movemos en un medio que es desconocido o al que no estamos acostumbrados. Resulta muy interesante enseñarles algo de esto a los chicos.

Por el sol

La forma más común es observando el amanecer y el ocaso. El sol sale por el Este y se oculta por el Oeste. A partir de allí podemos descubrir los restantes puntos cardinales.

Estaca en la tierra

Una forma utilizada por los Fenicios era clavar una estaca en la tierra y marcar con una piedra en la punta de la sobra que forma. Luego se aguarda unos 20 minutos y se vuelve a marcar con otra piedra la punta de la sombra. Si unimos estos dos puntos con una línea, nos marcará el Oeste y Este (la segunda marca es del lado del Este). 

Agujas del reloj

Para esto hay que apuntar al sol con el número 12. Así, la bisectriz (ángulo medio) que se forma entre las 12 y el número al que apunte la aguja de la hora, señalará el norte.

Las estrellas

En el hemisferio sur, la más conocida es la Cruz del Sur.

Prolongando cuatro veces y media su "palo" más largo hacia atrás, y proyectando el punto final perpendicularmente a la tierra obtendremos el rumbo Sur.

La luna

En cuarto creciente (mira hacia la izquierda, forma de D), las puntas de sus "cuernos" apuntan hacia el este. Por el contrario, en cuarto menguante (mira hacia la derecha, forma de C), estas puntal apuntan al oeste.

Signos de la naturaleza

Existen indicios en la naturaleza que pueden darnos pistas sobre la dirección que llevamos. No son muy precisos, pero en circunstancias excepcionales pueden impedir que perdamos el tiempo dando vueltas en círculo. Algunos pueden estar alterados por el microambiente.

o   Los musgos que se forman en las rocas y troncos de los árboles son mucho mayores en las caras que apuntan al Sur, ya que por la inclinación de la tierra, su cara más expuesta al sol es la que mira al Norte.

o   También las montañas reciben menos sol las laderas orientadas al Sur, por lo que suelen ser más húmedas, de tonalidades más frías y retienen la nieve por más tiempo.

o   Los anillos de crecimiento de los árboles suelen estar más desarrollados y ser más anchos hacia el lado Norte, donde reciben más sol.

o   Los árboles tienen más hojas del lado que les pega más el sol, es decir hacia el norte.

o   Los nidos son generalmente del lado Norte, porque es más soleado.

¿Cuánto tiempo de luz nos queda?

Poniendo el dedo índice a la altura del sol, cada dedo hacia abajo son 15 minutos de sol que queda hasta que oscurezca, contando hasta la altura del horizonte. (Una mano es una hora)

Básicamente, una brújula consiste en una pieza imantada suspendida de un eje que gracias a la atracción magnética que tiene el polo norte, siempre apunta hacia él.

Advertencia: el norte siempre es 0º en el cuadrante, y los ángulos se miden en sentido horario. De esta forma, el Este se ubica a 90º, el Sur a 180º y el Oeste a 270º. 

Posicionarse en un mapa (triangulación)

Lo primero que tenemos que hacer es ubicar el norte y pararnos en el terreno de cara a él.

Para esto agarramos la brújula en forma horizontal y vamos girando nosotros sobre nuestro mismo eje, hasta que la aguja coincida con el Norte marcado en la brújula.

En segundo lugar hay que poner el mapa en posición. Para esto haremos que el Norte del mapa (está marcado en el mismo por la rosa de los vientos o con una N) coincida con el Norte recién marcado en la brújula.

Determinación de la dirección de marcha en el mapa
Primero colocar la brújula sobre el mapa con un canto lateral sobre la recta que une la posición actual A y el punto de destino B. La flecha de dirección debe apuntar hacia el destino B.
Luego hay que girar el limbo de la brújula hasta que las líneas Norte-Sur estén ubicadas paralelamente a la de la marcada en el mapa por la rosa de los vientos.
El siguiente paso es levantar la brújula del mapa y apuntar el rumbo. Para esto hay que orientar la brújula hasta que la aguja magnética coincida con la marca nueva del Norte del limbo; entonces en esta dirección seleccionar puntos destacados del terreno como referencia.

Determinación de la posición actual propia
La brújula debe tener el Norte del limbo coincidiendo con el Norte natural. Para esto girar sobre el propio eje hasta que la aguja magnética señale el Norte natural, y ahí girar el limbo hasta que coincida Norte con Norte. Luego:
a. Apuntar con la brújula un punto conocido en el terreno (puede ser cualquier cosa que este marcada en el mapa).
b. Colocar la brújula sobre el mapa con el canto lateral en la marca del punto conocido y girarla hasta que las líneas Norte-Sur del limbo estén paralelas a la de la rosa de los vientos.
c. Trazar en el mapa una recta del canto lateral de la brújula, pasando por el punto conocido utilizado.
d. Elegir un segundo punto y proceder nuevamente según operaciones a-c.
e. El punto de intersección de las dos rectas marcadas indica la posición actual.

El Método por Desviación 90º

Este es el más sencillo y se realiza rodeando al obstáculo girando en ángulos de 90º.

1. Salís del punto A pretendiendo llegar al punto C, con rumbo 233°.

2. Te encuentras con el obstáculo en el punto B.

3. Cambias tu rumbo girando 90º (Para calcularlo con la brújula: 233º - 90º = 143º).

4. Caminas hasta salvar el obstáculo contando tus pasos: hasta el punto D.

5. En D haces un nuevo giro de 90º volviendo a tu dirección inicial (143º+90º = 233º).

6. Caminas de nuevo hasta salvar el obstáculo: punto E.

7. En E haces otro giro de 90º (233º + 90º = 343º) y avanzas tantos pasos como caminaste en 4 llegando al punto F.

8. En F te encontrarás en la línea A-C. Giráis 90º nuevamente (343º - 90º = 233º), y continuas tu camino.

Los mapas y cartas topográficas utilizan códigos de representación que deben conocerse para poder utilizarlos.
Uno de ellos, es la "Cuadrícula": es un cuadriculado sobre el mapa con líneas paralelas y perpendiculares a la línea Norte-Sur. Sino, traerá la “Rosa de los vientos” que marca los puntos cardinales con respecto al mapa.

También tenemos la “Escala” que es el tamaño proporcional en el que se halla representado el terreno. Por ejemplo 1:25000; que significa que un centímetro en el mapa corresponderá a 25000 centímetros reales, es decir, a 250 metros o 0.25 kilómetros.

Hay mapas que incluyen "Curvas de nivel". Estos son las denominadas cartas topográficas, es decir, que grafican las características del terreno. La superficie de la tierra no es completamente plana, sino que tiene diferentes niveles en altura. Cada curva corresponde a una altura en metros sobre el nivel del mar.